sábado, 11 de abril de 2009

SOBRE EL 2009

Yo no sé ustedes... pero yo estoy detestando este año.
El censo popular (popular de mis amigos, familiares y conocidos) concuerda en que este año ha estado lleno de tragedias, muertes, dramas, decepciones, fracasos y muy malos tragos.

Desde el primero de enero empecé con la noticia de que el papá de una de mis amigas más queridas de la prepa había fallecido a causa de su diabetes. Y yo no fui para ella más que una gran ausencia y decepción en todo el proceso...

Después vinieron varios choques, de los cuales sin duda el peor fue el de mi primo.
Fue demasiado para mí el lidiar con la idea de que podía morir y saber todo lo que eso podría ocasionar a mi familia… El mes que estuvo en terapia intensiva sin duda ha sido uno de los peores meses en mi vida y en la de mi familia. Por suerte ahora sus pulmones funcionan otra vez y lo que le espera es una larga recuperación, pero está vivo, y aunque su vida no volverá a ser la misma, aprendió su lección –muy triste que haya tenido que ser así.

Después vinieron las decepciones. Una tras otra, tras otra, tras otra… lo que aprendí de todo esto es que la culpa no la tienen las personas en quienes deposito tantas expectativas, la culpa la tengo yo por esperar tanto de las personas sin siquiera dar yo la mitad de lo que exijo. Sí, descubrí que soy una mala amiga, y también terminé de entender que tanto las personas como su importancia son transitorias. Todos los que en algún punto entran a mi vida, también han de salir. No hay vuelta atrás en ello, todos son lecciones, bien o mal aprendidas, pero eso son. (Aunque como en todo hay excepciones, yo espero que algunas personas no salgan nunca).

Más dramas y otras muertes vinieron. No de personas cercanas a mí, pero sí de personas cercanas a las personas que amo. Lo peor es que no son sólo muertes de abuelos o tíos que ya estaban grandes…

No sé, este recuento no es nada agradable y no puedo seguir con detalles. Sólo puedo afirmar que el 2009 no ha sido lo que yo esperaba y que se ha tratado de puras lecciones a la mala. De no ser por ti –que seguro leerás esto– este año no tendría nada bueno. Eres mi salvavidas y mi pedacito de cordura.

En fin, no queda más que seguir aguantando y esperar que en algún punto el 2009 deje de ser such a bitch.

1 comentario:

the lines on my face dijo...

chale, yo no sé, generalmente evaluo el año cuando está terminando... Lo empecé bien en algunas cosas, aunque muy mal de salud... entonces sí, tal vez no sea un buen año, pero ahora sí aunque suene choteadísimo y nefasto, hay que pensar positivo y disfrutar lo que tenemos.
muchos abrazos y ánimo!